Trump: El de siempre (VIII) EEUU bombardea Irán
El factor “sorpresa”
Entender el por qué del genocidio en Gaza, la expansión israelí en la región, el bombardeo estadounidense a las instalaciones del programa nuclear iraní y la ambición hegemónica de ese país en Oriente Medio (OM), implica historiar mentiras, sorpresas, hechos, antecedentes. Debo ponerme límites de extensión, pero, a veces, como en esta ocasión, es difícil. Disculpas por esto.
Factor “sorpresa” y consolidación del “Estado” judío
El factor “sorpresa” ha sido una constante en los ataques y guerras judeosionistas-israelíes a lo largo de sus 77 años de existencia como “Estado”. 1. Guerra árabe-israelí de 1948 o Guerra de la Independencia contra la coalición de estados árabes conformada por Egipto, Siria, Jordania, Irak y Líbano. Victoria israelí. La CIA estadounidense y el Mossad israelí jugaron un papel decisivo. Para los palestinos aparejó una catástrofe poblacional conocida como “La Nakba”. Trajo consigo la desposesión y el desarraigo de 750 mil palestinos. La mitad de la población palestina en ese entonces. 2. Guerra del Sinaí de 1956 o Crisis de Suez. Israel, conjuntamente con el Reino Unido y Francia, contra Egipto que fue invadido utilizando el factor “sorpresa”. Estaba en disputa el Canal de Suez que había sido nacionalizado por el presidente egipcio Gamal Abdel Nasser. Sin intervenir, directamente, EEUU fue el más beneficiado incrementando su influencia en Oriente Medio. 3. Guerra de los Seis Días en 1967 de Israel contra Egipto, Siria y Jordania. Igual “por sorpresa”. En seis días, Israel logró invadir la Franja de Gaza, la Península del Sinaí de Egipto, Cisjordania (incluida Jerusalén Este) y los Altos del Golán de Siria. Territorios que hasta ahora controla y ha extendido su dominio. 4. Guerra de Desgaste (1967-1970). Israel contra Egipto a lo largo del Canal de Suez. El objetivo, debilitar las fuerzas egipcias para su sometimiento o la imposición de una paz a favor israelí. 5. Guerra de Yom Kipur en 1973 contra Egipto y Siria que atacaron a Israel aprovechando la festividad judía de Yom Kipur, la más sagrada de los judíos. Israel contraatacó-por sorpresa- obligando a Egipto a firmar “Los Acuerdos de Camp David” y un “Tratado de Paz” con la “mediación” de Estados Unidos. 6. Primera Guerra contra Líbano en 1982. Israel invadió Líbano con el objetivo de expulsar a la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) del líder Yaser Arafat. La OLP salió de Beirut y los judeosionistas ocuparon el sur del Líbano donde actualmente se asientan sus colonos. 7. Segunda Guerra del Líbano en 2006, entre judeosionistas israelíes y la milicia chiíta Hezbolá en el sur del Líbano. Terminó con la intervención de la ONU y la Resolución 1701 que establecía la retirada de todas las fuerzas israelíes del Líbano (cosa que nunca se cumplió) y la presencia de una Fuerza Provisional de las Naciones Unidas en el Líbano (FINUL). Nunca sirvió para algo que no fuera ocultar los asesinatos y ataque israelíes secundados por la CIA y el Mossad. Actualmente el Líbano ha sido totalmente invadido por Israel. Este breve resumen da cuenta de cómo Israel fue asentando su expansión y dominio en la región sobre la base de territorios invadidos y usurpados y su conversión en un “Estado” subsidiario de Estados Unidos para asegurar la hegemonía de éste en Oriente Medio (OM).
Factor “sorpresa” para el exterminio palestino
La “sorpresa” ha estado presente en los sucesivos ataques a los palestinos y en sus enfrentamientos con las milicias de resistencia en Cisjordania y Gaza. A. Contra la “Primera Intifada” o levantamiento palestino entre 1987-1993. Condujo a los llamados “Acuerdos de Oslo” con la mediación de Noruega (por eso el nombre) y la intervención de Estados Unidos. Reconocía la autonomía palestina y el cese de la expansión de colonos israelíes. Cosa que Israel no cumplió haciendo de los acuerdos letra muerta. B. Contra la Segunda Intifada entre 2000-2005 con ataques militares israelíes a gran escala. C. Contra la milicia de resistencia palestina Hamás, en la Franja de Gaza entre 2008 y la actualidad. Incluye las operaciones “sorpresa”: Plomo Fundido (2008-2009). Pilar Defensivo (2012). Margen Protector (2014). Guerras de exterminio: la de 2021 y la actual, iniciada el 07 de octubre de 2023.
La “sorpresa” que no lo es
La “mentira” trumpiana para bombardear las instalaciones del programa nuclear iraní tuvo como objetivo real neutralizar el enriquecimiento de uranio que permitirá el avance tecnológico de Irán para su producción industrial, la investigación científica y la IA, el desarrollo social, la competitividad de su economía en el entorno del BRICS y de las monarquías árabes. Los avances alcanzados por Irán, en su producción bélica son, fundamentalmente, de carácter defensivo. Este es un mandato del Islam Chiita Duodecimano que es la religión oficial iraní según su Constitución. Usando tecnología de avanzada, Irán ha logrado colocarse a la vanguardia militar de los países árabes que secundan la presencia colonialista de la dupla Estados Unidos-Israel en Oriente Medio (OM).
Una digresión necesaria
El Islam Chiita, que profesa el 95% de la población iraní, se distingue del Islam Sunita por la creencia en la sucesión del Profeta Mahoma y el papel de los Imanes. Los sunitas, mayoritariamente árabes, creen que el liderazgo de la comunidad musulmana debe ser elegido por consenso. Los chiitas creen que Mahoma designó a su primo y yerno Alí ibn Abi Tálib como su sucesor inmediato y el primer imán. Los imanes son doce. De allí el calificativo de “Duodecimano”. Sostienen, que el último imán Muhammad al-Mahdi, no murió, sino que entró en un estado de "ocultación" (Ghayba) en el siglo IX. Los chiitas duodecimanos creen que al-Mahdi es el Mesías prometido que regresará al final de los tiempos, junto con Jesús, para establecer la justicia y la paz en la Tierra. Mientras tanto, los clérigos chiitas de alto rango, conocidos como Ayatolás, actúan como sus representantes y guías espirituales para su pueblo. Próxima entrega: El “Eje de Resistencia” iraní.